Por Arturo Torres, Estratega de Inteligencia de Amenazas para FortiGuard Labs de Fortinet América Latina y el Caribe
Estas últimas semanas hemos oído hablar mucho sobre el ChatGPT o su reciente nueva versión GPT-4 y cómo este chat basado en inteligencia artificial puede llegar a transformar la manera en la que nos comunicamos con los buscadores tradicionales, creamos textos, enviamos mensajes etc.
La forma en la que opera está basada en un modelo de lenguaje con más de 175 millones de parámetros, entrenado con grandes cantidades de texto para realizar tareas relacionadas con el lenguaje, desde la traducción hasta la generación de texto, utilizando algoritmos de inteligencia artificial (IA) como Procesamiento de Lenguaje Natural #NPL, entre otros.
Esto convierte a ChatGPT en una IA generativa, capaz de replicar la forma de pensar de una persona, creando así contenido, y si bien esta tecnología desarrollada por la empresa Open AI, puede traducirse en un sinfín de beneficios, trae consigo importantes retos a nivel seguridad, igual que cualquier tecnología emergente que opere en el ciberespacio.
Estamos viviendo en un panorama de ciberamenazas que crece a un modo exponencial, tan solo en el 2022 se detectaron 5 mil millones de intentos de ciberataques en República Dominicana, esto de acuerdo con los últimos datos obtenidos por FortiGuard Labs de Fortinet. Ante la llegada de herramientas que hacen uso intensivo de inteligencia artificial como ChatGPT o GPT-4 podemos esperar que las ciber-amenazas sigas evolucionando y creciendo, lo que convierte a la prevención y a la educación en nuestros mejores aliados para mantenernos más seguros y crear entre todos un mundo digital en el que todos podamos confiar.