Por Mario Antonio Lara Valdez
La fascinante experiencia visual desde esta montaña rodeada de pinos y cerezos demuestra esa diversidad que solo nuestra madre naturaleza nos deja observar en cada visita a la maravillosa provincia sureña de San Jose de Ocoa.
En cada pieza elaborada y mostrada por diseñadores también podemos escuchar desde las montañas voces de nuestros ancestros taínos al escuchar sonidos de maracas hecha de higüero, para complementar con esa sensación única y sensualidad que solo tambores, tambora, timbales y güira pueden impregnar en cada ritmo al bailar o caminar de la mujer dominicana.
San José de Ocoa surge en complicidad del candente sol cómo también del clima agradable dejándose acariciar por ese húmedo rocío que invita a un abrazo afectuoso este lugar de nombre Rancho La Vereda donde podemos creer que estamos rozando el cielo .
Dejando atrás ese estresante día a día en el Distrito Nacional para entrar en ese vuelo imaginario sobre distintos sembradío de naranjas , hortensia , pinos aguacates , caoba ,cerezas que perfuman la vida del ocoeño .
Eventos como este Festival del Cerezo RD debe ser aprovechado desde los sectores sociales, económicos y gubernamentales por ese indiscutible potencial para atraer visitantes nacionales e internacionales interesados en descubrir los atractivos turísticos de la República Dominicana.
La industria de la moda está impactando por ese descubrimiento de los nuevos relevos dominicano que deben seguir los pasos de Óscar De la Renta, Sully Bonnelly, Jorge Diep, Leonel Lirio, Gianinna Azar, Yeny Polanco y Luis Domínguez generando empleos como nuevos negocios a nivel nacional.
Lograr llegar a ese equilibrio ambiental pero dejando espacio para el desarrollo económico y social es fundamental para este tipo de provincias que debe garantizar esa dinámica de los sectores productivos para sus habitantes llevando a su máximo potencial.