El exgobernador del Banco Central, José Lois Malkun, dijo que los retos principales del gobierno en la próxima Reforma Fiscal es enfrentar con valentía a los evasores del Impuesto Sobre la Renta y del sector eléctrico, así como reducir los subsidios al mercado eléctrico y al negocio de los combustibles.
Además, regular las exoneraciones que se están aplicando y la parte del gasto, o sea, cómo reducir el gasto público en algunos casos que obviamente están afectando las finanzas públicas como es el subsidio eléctrico, que es una cifra astronómica de casi 90,000 millones de pesos al año, 1,500 millones de dólares,
Al ser entrevistado por Andrés Matos, en el matutino “Periodismo y Sociedad TV” en el canal 19, el también exministro de Finanzas expreso: “eso del sector eléctrico es un hoyo fiscal muy grande, RD$90,000 millones, Igualmente el subsidio de la gasolina que también está drenando los recursos al gobierno todas las semanas son dos o trescientos, RD$400 millones para cubrir el subsidio”.
Entiende que en el caso del sector eléctrico la solución es privatizar la distribución eléctrica, que le pueden generar al país 700 u 800 millones de dólares de inversión privada y que reduciría ese astronómico subsidio.
Resaltó que la privatización apoyada en el esfuerzo de transparencia que muestra el gobierno se puede hacer algo diferente: una privatización regionalizada, transparente como se están haciendo todas las licitaciones hoy en día, que le pueden generar al país 700 u 800 millones de dólares de inversión privada y que reduciría ese astronómico subsidio.
Considera que otra medida que para salvar la rentabilidad del sector eléctrico es lograr que todos los hogares deben tener instalado un contador, todo el mundo tiene que pagar la luz, que eso no lo cumplió Unión Fenosa ni las otras empresas.
En cuanto a los evasores de gran escala del sector, también “meterle el guante” porque aquí hay gente grandes consumidores que roban luz y, esas también son medidas que hay que comenzar a aplicar, un régimen de consecuencias para reducir el déficit. Si el gobierno quiera subsidiar eso es otra cosa. dijos, intereses, lo que sea y hacen planes de pagos para más o menos ponerse al día”
Dijo que hasta que aquí no caigan presas dos o tres personas grandes y que se dé un ejemplo de que ya no es una cuestión de que evadir impuestos por miles de millones y después sentarse con la Dirección General de Impuestos interno, así nunca vamos a resolver nada, la gente va a seguir evadiendo, entonces hay que aplicar ya penalidades más fuertes y hasta que eso no ocurra.
“Entonces hay que tomar medidas para reducir la evasión porque es cierto que no hacemos nada con una nueva reforma fiscal y la gente sigue evadiendo. Igualmente, con la informalidad, los negocios informales no pagan nada, no pagan impuestos de la renta, no pagan seguridad social y emplean gentes ilegales, en fin, eso hay que regularlo ya sea”, enfatizó.
El reto del gobierno está en reducir problemas financieros provocados por el déficit financiero de los sectores eléctrico y del negocio de los combustibles.
Señaló que los planes sociales del gobierno que son un volumen alto deben ser reestructurados. En ese caso sugirió que la tarjeta de solidaridad, yo entiendo debe aumentarse a dos mil pesos ya que la inflación ha ido drenando el poder adquisitivo.
Resaltó que la idea de una reforma fiscal es buscar una mejora en la distribución del ingreso, atraer más inversión al país para que genere más empleo y reducir la pobreza.
Al definir la diferencia entre reforma tributaria y la fiscal expresó que la una abarca muchos aspectos solo en términos de la administración tributaria, valorando la eficiencia, etcétera mientras que una reforma fiscal social está más enfocada hacia el tema de recaudación mediante impuestos a través de una serie de disposiciones que implican el impuesto sobre la renta, el pago de las exenciones, los selectivos, etc.