Este lunes, la ciudad de Santo Domingo amaneció envuelta en una densa neblina que sorprendió a sus habitantes en las primeras horas de la mañana. El fenómeno redujo la visibilidad en varias avenidas principales, lo que generó precaución entre conductores y transeúntes.
Las condiciones atmosféricas que provocaron la neblina fueron atribuidas a una combinación de bajas temperaturas nocturnas y alta humedad, factores que suelen intensificarse en esta época del año. Las autoridades meteorológicas aconsejaron a los ciudadanos circular con luces encendidas y reducir la velocidad para evitar accidentes en la vía pública.
La neblina comenzó a disiparse a medida que avanzó la mañana, dejando tras de sí un ambiente fresco en la capital y sus alrededores.
La neblina se produce cuando el aire cerca del suelo está lleno de humedad y la temperatura desciende lo suficiente para que esa humedad se condense en pequeñas gotas de agua en suspensión, formando una especie de “nube” a nivel del suelo. Este fenómeno suele ocurrir en la madrugada o en las primeras horas de la mañana, cuando el suelo se enfría después de la noche, especialmente si el cielo está despejado y hay poco viento.