Los jueces del Segundo Tribunal Colegiado del Distrito Nacional declararon la extinción penal del proceso seguido contra el inversionista canadiense Antonio Carbone, quien era acusado de intento de homicidio contra su exempleado Fernando Arturo Báez Guerrero.
La decisión del tribunal se basó en el vencimiento del plazo máximo de duración del proceso, conforme al artículo 148 del Código Procesal Penal, el cual establece un límite de tres años desde el inicio de las investigaciones.
El abogado del empresario, Roberto Rosario, manifestó que su defendido finalmente se ha liberado de un prolongado proceso judicial que duró más de una década. “Esta medida se adoptó tras el largo período de más de 10 años en que el señor Carbone estuvo sujeto a medidas de coerción, incluyendo nueve años y cuatro meses en prisión”, afirmó Rosario.
El tribunal, presidido por la magistrada Claribel Nivar Arias e integrado por las juezas Yissel Soto y Clara Sobeida, emitió la sentencia de manera unánime. Rosario enfatizó que esta decisión sienta un precedente importante para otros ciudadanos que enfrentan procesos judiciales prolongados.
Por su parte, Antonio Carbone expresó que la decisión representa un acto de justicia tras haber sido víctima del sistema judicial y de una supuesta conspiración en su contra. Además, instó al cumplimiento de la sentencia del Tribunal Constitucional (TC), la cual ordena la devolución de sus bienes, valorados en más de 580 millones de dólares.
Carbone agradeció la labor de sus abogados, Roberto Rosario, Hotoniel Bonilla y Luis Jiménez Burgos, quienes lograron fundamentar su defensa en base al derecho y la justicia.