El director ejecutivo de Edesur, Milton Morrison, comentó que cuando llegó en agosto de 2020 a Edesur, encontró una empresa de espalda al cliente, sin un nivel de atención adecuada ni el respeto que estos merecen.
“¿Por qué digo eso? Porque encontré miles de reclamos que hacían muchos clientes no solo por alta facturación, sino por otros tipos de servicios y, nosotros, iniciamos inmediatamente un proceso de acercamiento, de darle respuesta a eso”, afirmó Morrison.
Dijo que por primera vez desde Edesur se hizo algo, que fue hacer una devolución-acreditación a clientes que claramente habían identificado, a los que la empresa le había hecho una facturación errónea.
Explicó que esto se debió, entre otras cosas, al tema de la pandemia, espacio donde hubo un descuido y encontró, además, la gestión de los “apagones programados”, que consistía en clasificar los circuitos en a, b, c y d, es decir, que el que vivía en un sector “c y d” recibía entre 8 y 12 horas de apagones, lo que abolieron.
Afirmó que en la actualidad hay un abastecimiento de más de un 90% y señaló que a un cliente se le va la energía por razones diversas: por déficit de generación, porque no producen energía; por temas de mantenimiento o una avería en transmisión, porque un carro chocó un poste de luz, un transformador explotó, entre otras.
Dijo que encontraron a Edesur, además, con muchas oportunidades, como, por ejemplo, la de organizar la casa, ya que carecía de ciertas políticas. Resaltó la certificación de la distribuidora en antisoborno, la de cumplimiento y la ISO 9000 que es la de calidad, logrando convertirse en la primera empresa en tener tres certificaciones.