Organizaciones sociales y populares de esta ciudad llevaron a cabo un contundente entierro simbólico el miércoles, en el que diferentes funcionarios municipales y estatales fueron «sepultados» en un acto que busca visibilizar la falta de atención a las múltiples necesidades de la comunidad.
La presidenta nacional de Hispanos Unidos por la Paz y los Derechos Humanos, Rebeca Henríquez, estuvo presente acompañando al Frente Amplio de Lucha Popular (FALPO) en esta manifestación que reunió a numerosos ciudadanos preocupados por la situación actual en la provincia Duarte. Los manifestantes se concentraron en la intersección de la Avenida Libertad con Papio Olivier antes de marchar hacia la Gobernación, donde expresaron su descontento.
Portando pancartas y vociferando consignas, los asistentes denunciaron la deficiencia de las autoridades locales para atender demandas que han sido planteadas por años. De forma simbólica, introdujeron en ataúdes pintados de negro a los funcionarios, alegando que están “muertos” ante las supuestas debilidades en su gestión.
Entre las principales exigencias del movimiento se destacan:
– La construcción de la carretera San Francisco – Río San Juan.
– La creación de la Plaza de la Cultura.
– La terminación del hospital local.
– La finalización de la circunvalación.
– Asentamientos agrarios.
– Atención a los sectores populares y urbanizaciones.
– Normalización del servicio de agua.
– La edificación de un laboratorio para la UASD, recinto San Francisco de Macorís.
Este acto simbólico no solo busca exigir respuestas inmediatas a las autoridades, sino también generar conciencia sobre la importancia del compromiso gubernamental con el bienestar social y el desarrollo comunitario.