Hispanos Unidos por la Paz y los Derechos Humanos, junto con Derechos Humanos Global, presidida por Rebeca Henríquez responsabiliza a las autoridades locales y nacionales por cualquier eventualidad que impida a los ciudadanos recibir atención médica adecuada en el Hospital San Vicente de Paúl. La alarmante falta de equipos médicos, camas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y medicamentos esenciales ha llevado a una crisis que no puede ser ignorada.
A pesar de las constantes denuncias que hemos realizado sobre la precariedad y mala administración del hospital, las autoridades han optado por proteger al director Rafael Mieses, quien ha demostrado ser ineficaz en su gestión. Es inhumano que se desatiendan las necesidades básicas del pueblo mientras los funcionarios públicos y sus familias gozan de seguros médicos privados, distanciándose de la dura realidad que enfrenta la ciudadanía. Además, protegen al director y no buscan soluciones a la falta de equipos médicos para realizar estudios de alto costo, así como habilitar más unidades de UCI y asegurar insumos médicos necesarios.
“Les recordamos a las autoridades que no podemos permitir que un derecho tan importante como es la salud continúe siendo vulnerado por quienes deben respetarlo. Ustedes fueron elegidos por el pueblo y deben responderle. En esta Navidad y todo el año, el pueblo merece respeto a sus derechos” explica Rebeca Henríquez.
Ambas organizaciones exigen acciones inmediatas para abordar esta crisis y garantizar el derecho a un servicio digno de salud para todos. La vida y bienestar de los ciudadanos deben ser una prioridad, y es imperativo que las autoridades tomen medidas efectivas para mejorar las condiciones del Hospital San Vicente de Paúl.
«No nos quedaremos callados ante esta situación; continuaremos alzando nuestra voz hasta que se logren cambios significativos y se respete el derecho fundamental a la salud» puntualiza.