SANTO DOMINGO.- Un grupo ciudadanos inversionista denuncian un alegado intento del Banco de Reservas de la República Dominicana, de defraudarles a través de un embargo inmobiliario.
El licenciado Brasil Jiménez abogado de los propietarios originales del terreno, señores Rafael Corpas Peláez y José Francisco Bonet y otros ciudadanos españoles, informó que sus representados son compradores de varias unidades en el edificio de apartamentos Torre Marina, ubicado en el Distrito Nacional y financiado por dicho banco.
Los denunciantes aseguran que esta institución financiera se ha negado a recibir los pagos que de manera reiterada han ofrecido, con el fin de excluir sus respectivas unidades del procedimiento de embargo inmobiliario iniciado por el Banco en contra de la empresa constructora del proyecto.
Agregan los denunciantes, que desde hace años el Banco está enterado de que ellos adquirieron unidades en dicha torre, las cuales nunca pudieron transferir a su nombre por razones que atribuyen a la empresa constructora y al propio banco; refieren que ni el banco ni la constructora, gestionaron oportunamente el correspondiente régimen de condominios, a partir del cual quedarían individualizadas las distintas unidades, posibilitando que cada comprador transfirieran a su nombre la unidad que había adquirido.
Explican que lo peor de la situación es que luego de que los títulos de cada unidad fueron emitidos, el banco inscribió hipotecas sobre cada propiedad, no obstante conocer que no existían deudas sobre las mismas y luego de ello, se ha negado a resolver la situación con el ánimo de quedarse ilegítimamente con la totalidad de un activo sobre el cual no tiene derechos.
“El propósito de la denuncia, es que las autoridades correspondientes, en especial la Superintendencia de Bancos y el Instituto Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor (PRO CONSUMIDOR) intervengan en el asunto a fin de evitar daños irreparables.