El presidente Luís Abinader mantiene firme la decisión de hacerle frente a los actos de corrupción que puedan ocurrir en el seno de su gobierno.
Una vez más Luís Abinader destituye a los funcionarios que son señalados que han incurrido en algún acto de corrupción en el manejo de sus funciones.
Los opositores cada vez que el presidente Abinader separa a un funcionario de su puesto, se frotan las manos, pero no se dan cuenta que el mandatario está haciendo lo correcto.
El presidente Luís Abinader en ningún momento dijo que los miembros del Partido Revolucionario Moderno o los aliados no son corruptos, sino que no iba a permitir que el dinero del pueblo sea dilapidado.
Contrario a lo que ocurría en el pasado, que por más denuncia de actos de corrupción que se denunciaba, nadie hacía nada para hacerle frente.
Es aplaudible la decisión del presidente Luís Abinader, en el sentido que no hay vacas sagradas al momento de combatir los actos de corrupción.
El pueblo debe apoyar al jefe del Estado, que por primera vez separa y pone a disposición del Ministerio Público, a aquellos funcionarios que son señalados de cometer actos de corrupción.